
Por su mirada. Por su sonrisa. Por sus besos. Por sus caricias. Por sus palabras. Sus manos, su pelo. Todo.
Por como me haces sentir. Por las risas. Por aquellas pequeñas cosas que no se pueden contar.. Gracias y mil gracias. Gracias por soportarme, por hacerme reirme del mundo, por intentar que me despreocupe, por presionarme para que todo me salga bien, por preocuparte por mí. Gracias por lo que sientes. Gracias por hacer de días de lluvia dias soleados, y de días de nieve los mejores días de mi vida. Gracias por todos esos recuerdos que tendré grabados en mi mente para siempre, y gracias aún más por demostrarme que esos recuerdos serán cada vez más y mejores.
Suena irónico, pero.. Gracias también por hacermelo pasar mal, por ponerme a prueba. Gracias por enseñarme cosas que antes no sabía, cosas que jamás hubiera experimentado si no hubiese sido por ti.
Porque es casi un año, joder.
Gracias por enseñarme a vivir, a querer. Gracias, simplemente, por existir.