
Esta entrada va dedicada a todos aquellos gilipollas que, no obstante con que sus vidas ya den pena de por sí, tienen que intentar que la de los demas tambien la dé.
Para todos esos egocéntricos que carecen de personalidad, que son todos iguales, que ni siquiera sabrían afrontar solos los problemas de verdad..
También se la dedico a la cantidad de hipócritas que me rodean día a día.
A todas esas personas que se sienten superiores al resto.. Pobres ignorantes; lo que no saben es donde se encuentran en realidad, en lo mas profundo del subsuelo..
Y por último, pero no menos importante, se lo dedico también a las personas que sufren o se preocupan por este tipo de gente. ¿Para qué? No lo hagáis, nadie así merece la pena, nadie va a agradecéroslo, cualquier lágrima derramada por ellos será en vano..
Por eso mismo, esa gente nunca llegará a ningun lugar, y mira que me alegro de verdad.. Porque no. No. Así no se puede ser..
Y bueo, ya puestos, también le voy a dedicar hoy la entrada al señorito Pablo Tardío, porque gracias a él me he dado cuenta de muchas cosas, y me ha hecho pensar en quien merece la pena de verdad, que es lo que al fín y al cabo importa.
OH SI...creo que me encanta
ResponderEliminarpobres ignorantes, pobres jajaja
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